Hípica Plúmbica en Chile

Gozalo Reyes R. nos cuenta: “La institución central se llama JOCKEY CLUB DE VIÑA DEL MAR, luego durante su funcionamiento, se fundó en paralelo el HIPODROMO DE SANTIAGO en 1980 que funcionó hasta el 2004/2005. A pesar de que hoy en día sigue funcionando el JOCKEY CLUB DE VIÑA DEL MAR, este inició sus actividades en 1932 según las malas lenguas y su Presidente siempre será Alberto Reyes Señoret (1914-2010), en mi caso, mi abuelo materno. Son 52 reuniones por año con 6 carreras por reunión aunque por razones diversas, esto se ha modificado de vez en cuando. Actualmente hay solo 4 propietarios activos, la pandemia encerró a 2 miembros (que para todos los casos no se hablaban ni antes ni después).

BREVE RESEÑA HISTÓRICA DEL JOCKEY CLUB DE VIÑA DEL MAR

Las carreritas nacen alrededor de 1924 como resultado del juego inventado por los niños Olegario y Alberto Reyes Señoret consistente en bolitas de piedra con nombres de caballos de carrera que hacían rodar por un plano inclinado descubierto en la casa de sus abuelos maternos, ubicada en el barrio de Agua Santa en Viña del Mar. Muy pronto algunos tíos, Nicanor, Julio y Ramiro Señoret y el primo Eduardo Silva se incorporan al juego y estos como hípicos mayores pero con un arraigado sentido lúdico comienzan a darle una estruc­tura formal al juego. Se reglamenta el tamaño y peso de las bolitas, la selección de nombres de caballos existentes que éstas iban a tener y se designa un juez de llegada. Tiempo después deciden abandonar el plano inclinado y las bolitas empezando a utilizar caballos hechos de plomo que debían ser impulsados por dados. Ese cambio radical da origen a un período de gran creatividad reglamentaria agregándose entre otros el concepto del contratiempo hípico a partir de combinaciones aleatorias de los dados. Empiezan a haber rodadas, mancaduras y hasta muerte de ejemplares. Se adopta el programa de carreras del Club Hípico de Santiago con sus grandes clásicos y por ello se confecciona una mesa con la pista de carreras dispues­ta “a la mano del Club”. Sin embargo, siguiendo la usanza de la época durante la Temporada de Verano se corren los clásicos del Valparaíso Sporting Club. Por esa época las carreritas se han formalizado como un club de amigos adquiriendo el nombre de Club Hípico de Viña del Mar (CHVM). Por el año 1930 Alberto Reyes aprovecha una larga convalecencia de tifus para desarrollar con la ayuda de su hermano Jaime un sistema de handicap basado en las probabilidades matemáticas de que los ejem­plares participantes alcancen al mismo tiempo la meta a pesar de repetir una distinta cantidad de dados. Este sistema bastante sofisticado reina sin contrapeso por largos años en las carreras ordinarias. Para los clásicos se había adoptado desde un principio la Tabla de Pesos por Edad y una formulación matemática que considera el peso que lleva el caballo en competencia y la distancia a recorrer. A través del tiempo se van incorporando nuevos aficionados que se van sucediéndose unos a otros, varios de los cuales son recordados hoy día a través del nombre de los clásicos que se disputan. El hipódromo en miniatura va cambiando de domicilio alrededor de la ciudad de Viña del Mar. Por el año 1949 se incendia totalmente la casa del socio Ximeno Urenda Zegers en un día de reunión hípica quedando destruidos la antigua mesa y muchos caballos. Pero el Club Hípico de Viña del Mar resurge de sus cenizas para seguir creciendo y complejizando sus reglas. A fines de los años 50 el CHVM entra en un largo receso. A principio de los 70 el CHVM es rescatado por Pablo Reyes (PRV) y Carlos Foweraker (CAF) en gran parte gracias a la existencia de un molde hecho por el antiguo socio Mauricio Vallejo Ladrón de Guevara lo que permitió invitar a aficionados hípicos del Sporting a entrar al juego. Tiempo después, por los 80, y tras un nuevo receso la actividad se traslada a Santiago con el nombre de Hipódromo de Santiago. Luego se crea el Jockey Club de Viña del Mar como entidad que engloba a los dos hipódromos que empiezan a funcionar paralelamente. Se adoptan avances “técnicos” como el fallo fotográfico. En lo reglamentario se produce la última gran enmienda realizada hasta ahora ideada por Eugenio Valenzuela (EVC), que es la adopción del Handicap Automático en desmedro de la Tabla de Probabilidades, o Tabla Arcaica. Por el año 2012, por fin el JCVM empieza a tener un Reglamento escrito formado en base a una compilación de toda la normativa hípica plúmbica que se ha ido creando en el tiempo. Publicado en el número 41 de la revista elturf.com el 1ero. de abril de 2008 no deje de leer el pdf “Historia Plúmbica” que se encuentra a continuación:

REGISTRO DE COLORES DEL JOCKEY CLUB DE VIÑA DEL MAR

 

Cada 100 metros teóricos hay diez rayas o sea que cada espacio son 10 metros y el total de la pista mide 2.000 metros.

La pista no tiene andariveles para cada caballo ni tampoco hay más rayas en los codos que en las rectas lo que equivale a decir que las carreras en todo su recorrido se corren a puro dado utilizando 6 dados a esos efectos.

Cada propietario tiene una caja con aprox. 50 caballitos, los cuales son de diferentes generaciones (corren desde los 2 a los 6 años).

La modalidad de las carreras es siguiendo los lineamientos de las que se corren en los hipódromos chilenos es decir se basan en Índices.

Los caballos inician su campaña con índice 0, no ganador, lo que sólo les permite «tirar y sumar»…. tira 18, avanza 18…

Cuando gana por 1ª vez, suma 18 puntos., desde 1 a 19 puntos, se le pone una cinta blanca al cuello…. lo que le permite «repetir» para intentar mejorar el peor dado…. Tira 1, 2, 3, 3, 4, 6 (19)… toma el 1 y lo «repite para mejorar», si tira 6, llega a 24…
desde 20 a 29, cinta roja, repite 2
30 a 39, cinta verde, repite 3

40 a 49, cinta amarilla, repite 4

50 a 99, cinta azul, repite 5

100 o más, cinta tricolor, repite 6

Las no figuraciones hacen bajar un punto, los triunfos y figuraciones hacen subir…. en los handicap se ejecuta una tabla por distancia (es parte del reglamento de la hípica en Chile), en las condicionales y clásicos los puntos son fijos, pero evidentemente los G1 entregan más puntos…

Si bajan mucho, por ejemplo si llegó a índice 30 (verde), pero baja a 19… «pierde el dado»… y vuelve cinta roja

En las carreras de Handicap hay rangos…
13 e inferiores, 10-17, 14-21, 18-25, 22-29, 26-33, 30-37… se inscriben caballos en ese rango…

Ejemplo: carrera de 1.400mts. (22 al 29)

El de indice 22 va a los palos en la partida…. el de índice 27 va 5 x 1,4 más atrás = 7 más atrás…. (corre 1470mts…), tiene menos opción, pero quizás repite 3 dados en vez de dos…. y así se arma la estrategia del handicap…. Añatar (ir al bombo) para bajar puntos y tener más opción en las carreras handicap…”

LA OTRA HIPICA EDICION 328 JCVM

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Referencia:

Gonzalo Reyes R.

Luis Costa Baleta

 

 

 

 

 

 

G-71LDCZC6ZG